“Onichan, amanointema eju jaguata chendive camino a la iglesia de Caacupé, por favor Uwu”, dijo Bekawaii en sus redes y causó furor.
La tiktoker conocida como Onichan, no quiso quedar fuera de la fiesta mariana más grande del país, se puso su peluca y salió a peregrinar.
Pero su paso por la capital de la fe, no le cayó bien a algunas personas que le bajaron la caña.
“La Virgen va a salir corriendo cuando te vea”, “Seguí nomas de largo”, le decían a la creadora de contenido.
En contacto con EXTRA, Beka contó que es la tercera vez que va a Caacupé, pero esta vez fue con una petición especial, le pidió a la Virgencita que paren de tirarle mala onda en redes sociales.
“Más que nada me fui por la experiencia, pero aproveché para pedirle a la Virgen que pare la ola de odio que recibo, porque es algo que me quebranta, por eso caminé”, comentó.
Se cansó del odio
La influencer comentó que estaba preparada para recibir todo tipo de comentarios, en especial las críticas por ir a Caacupé, siendo que ella era creadora de contenido erótico en páginas tie’y.
“La verdad que me da igual lo que digan, ya tenía en mente que iban a comentar cosas así, pero es mi libertad de expresión, soy un ser humano y quiero vivir la misma experiencia que los demás también”, expresó.
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Resaltó que en redes sociales recibe muchas bajadas de caña y eso llegó a afectarle por lo que decidió tomar terapia y hacer su promesa a la virgen de Caacupé.
“Me di cuenta de que hay mucho odio, quiero creer que es menos que el cariño, pero sí, me afecta mucho, por eso hice esa promesa. La próxima semana ya tengo mi primera consulta con el psicólogo”, señaló.
No entiende
Onichan aseguró que ella no le hace daño a nadie, por lo que no entiende por qué la critican tanto y la cuestionan.
“Yo siento que no le hago daño a nadie, mi contenido no incita al odio, entonces yo no entiendo por qué la gente es así conmigo”, manifestó.
Dentro de todo, destacó la buena onda y el cariño que recibió durante su peregrinación y advirtió que no dejará de crear contenidos.
“Recibí mucho cariño, abrazos, gente que se emocionaba. Pero no voy a dejar de hacer contenido, al contrario, cada vez que me quieran tirar para abajo voy a hacer más contenido”, destacó.
Descontrol
Su llegada a Caacupé causó revuelo y cientos de fans se aglomeraron para tomarse una foto con la chica otaku y no faltó el desubicado que quiso sobrepasarse.
“Me sorprendió la cantidad de gente que me pidió fotos, se acumuló mucha gente, llegó un punto que fue peligroso porque nosotros estábamos entre dos nomás y me quisieron manosear, mi novio casi se pelea con uno que me apretó y tuvimos que correr, la policía nos ayudó”, remató.
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