Luana Alonso dio la cara luego de que el Comité Olímpico Paraguayo informe que fue rajada de la Villa de Atletas por crear un “ambiente inapropiado” tras su renuncia a la natación en plena disputa de los Juegos Olímpicos.
“Solo quería aclarar que nunca me sacaron o me expulsaron de ningún lado, dejen de difundir información falsa. No quiero dar ningún comunicado, pero tampoco voy a dejar que las mentiras me afecten”, dijo en sus redes sociales.
Derechito a los Estados Unidos se fue Luana tras el escándalo que armó.
La ahora exnadadora mostró en su Instagram que regresó a la Universidad Southern Methodist en Dallas para retomar sus estudios en la carrera de Ciencias Políticas.
“Voy a ir a Estados Unidos a terminar mi carrera de Ciencias Políticas y, por qué no, ser ministra de Deportes algún día, porque yo como deportista sé lo que sufren los deportistas y quiero impulsar el deporte. Les pido que luchen por sus sueños”, había señalado la rubia al anunciar que se retiraba.
Fue akãrasy
Al quedar en el sexto lugar, en su debut y despedida de las Olimpiadas, Luana anunció que colgaba la malla.
“Tomé la decisión de dejar y estoy feliz de que mi última carrera sea en los Juegos Olímpicos”, dijo y desató guyryry internacional.
Esa misma noche abandonó la Villa de los Atletas, pero no se lo comunicó oficialmente al Comité, según el presidente.
Dirigentes lamentaron su comportamiento y hablaron de una fuerte sanción por abandonar de esa forma el equipo paraguayo.
Alonso se paseó por París y hasta se viralizó una supuesta foto suya en una farra con un influencer brasileño.
Larissa Shaerrer, jefa de la Misión de Paraguay, explicó que tuvieron que echarla porque tras renunciar intentó reingresar a la Villa de Atletas, descomponía ndaje el grupo y ya “no cumplía con los parámetros de una atleta de alto rendimiento”.