Los choques de cabeza dentro del campo de juego generan siempre alertas al cuerpo técnico. Más aún cuando el jugador tarda en recuperarse o revela una molestia que no pasa tras el salto.
Después de estudiar unos cuántos antecedentes la Junta de la Asociación Internacional de Fútbol (IFAB) dio el visto bueno para un proyecto que busca prohibir los cabezazos. Lo que por ahora será una prueba se llevará a cabo en la Asociación Inglesa de Fútbol (FA), con la categoría Sub 12, según informó The Athletic.
Según varios informes, la acción de cabecear está directamente relacionada con la demencia. De hecho, un estudio que se llevó a cabo en Europa muestra que los ex futbolistas escoceses nacidos entre 1900 y 1976 tenían tres veces y media más probabilidades de tener esta enfermedad como causa de muerte.
Pero el historial sigue. En 2002, un forense descubrió que el cabezazo fue la causa de muerte del ex delantero Jeff Astle, una de las leyendas del West Bromwich Albion. El veredicto, en aquel entonces, se registró como “muerte por enfermedad industrial”. Y la lista continúa con cinco miembros de la selección ganadora del Mundial de Inglaterra en 1966, que fueron diagnosticados con demencia. Cuatro de ellos fallecieron debido a esa enfermedad, según publica el portal Olé.
En el 2021 la Premier League había incorporado la medida de añadir dos cambios más (un total de cinco) si alguno de los jugadores sufría una lesión en la cabeza y mostraba síntomas de conmoción cerebral.