Chutaba la pelota desde muy mitã'i y por su mente la idea de ser profesional iba creciendo a medida que aumentaba de estatura.
Roberto Fernández Urbieta llegó a la capital desde la lejana Concepción, con la mira puesta en ser transferido al exterior. Y aquello que empezó como una fantasía de niño, hoy es toda una realidad. Gracias a su brillante desempeño en la zona defensiva de Guaraní, el Dinamo de Moscú se fijó en él y compró el 80% de su pase por un periodo de 5 años. Choco reemplazará a otro paraguayo, Fabián Balbuena, quien volvió al Corinthians.
Este salto a Europa tiene además un sabor más que especial debido al origen humilde del futbolista.
Su mamá, doña Otilia, fue entrevistada por el portal Concepción al Día. Ella estaba sentada bajo una enorme sombrilla en un rincón del mercado local. Desde hace años, la mujer tiene allí un puestito. Choco no era ajeno al emprendimiento familiar.
“Desde chico él venía acá a ayudarme a vender frutas y verduras, inclusive hasta hace poco tiempo estuvo acá ayudándome”, contó ña Oti.
Orgullosa por demás, mencionó que la emoción no le cabe en el pecho porque su hijo irá a probar suerte en tierras lejanas.
“Hace tiempo él estaba esperando esta oportunidad, cuando nos comentó la noticia toda la familia, amigos y vecinos nos alegramos mucho”, expresó.
Por último reveló que su máximo anhelo es vestir la Albirroja.
“Su gran sueño es ser figura con la selección paraguaya”, afirmó.