Ayer fue jornada de partidos de alto vuelo por la Libertadores y la Sudamericana. El DT de Ameliano, Aldo Bobadilla, expresó que quedó bajoneado por la eliminación de su equipo ante Libertad, hasta que se enteró qué tal le fue a su hijo, Damián, en el Sao Paulo.
“Dos sensaciones muy fuertes las que viví ayer. Después de la conferencia de prensa, estábamos todavía tristes por lo que nos pasó, quedar afuera en los penales de ayer, en el vestuario todos estábamos tristes. Ahí, al revisar el teléfono también para saber si ellos lograron pasar o no, me entero de que pasaron, ganaron el partido y que él convirtió el gol, porque es hijo mío y porque es paraguayo”, dijo a Fútbol a lo Grande.
Manifestó que dirigir a un club es como tener a muchos hijos a su cargo y que fue eso lo que vivió ayer. Tenía a “muchos hijos en un sector y a un hijo en el extranjero. Soy muy pasional, de exigir mucho a mis jugadores, pero así también me acerco, que se sientan cómodos”, señaló.
Destacó que en los tres partidos contra Libertad que tuvieron al hilo los plantearon con diferentes estrategias.
“Tuvimos dificultades en sostener un mismo equipo pero lo bueno es que los que entraron respondieron. Hubo mucho compromiso de todos”, indicó.
Impactados
El arquero de Ameliano, Nicolás Rossi, le atajó sus penales a dos mundialistas de Libertad, Óscar Tacuara Cardozo y Cristian Riveros. Sin embargo desperdiciaron tres remates y quedaron fuera.
El golero manifestó que durmió muy poco y que se presentó así a la práctica de hoy después de horas de analizar y analizar cada jugada.
“Mucha tristeza se vivió, pero lo que pasó pasó, no podemos reprocharnos nada y ahora pensamos en Olimpia”, resaltó Rossi.
En Fútbol a lo Grande comentaron también que el presidente de Ameliano, Héctor Melgarejo, no se animó a entrar a vestuario al culminar el partido y que recién hoy tuvo la fortaleza para hacerlo en la práctica.