12 nov. 2024

“Quiere que sea ama de casa, pero yo me planto y peor él se pone”

Ethel dijo que no quiere depender de nadie económicamente.

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Edith Moreno

Soy Ethel. Me casé hace cuestión de dos años. Yo tengo 29 y mi marido 35. La verdad que todo era color de rosa con mi actual pareja hasta que empezamos a tener choques fuertes porque no soy sumisa.

Mi marido es un hombre que viene de una familia tradicionalista, cree que la mujer es de la casa y el hombre es el que debe proveer.

Entonces, lo que pasa es que él desde un principio quiso que me quede en la casa, que me encargue de las cosas, y él nomás pone la plata.

Me dice que lo que yo necesite le tengo que pedir, incluso me ofreció darme un monto mensual para que yo me maneje y no tenga que estar pidiéndole a cada el rato.

Pero nunca accedí, me gusta mi independencia porque pienso mucho que se pueden dar algunas situaciones en donde por más de que ahora él este ganando bien, puede un día quedarse sin trabajo, puede ocurrir alguna situación de enfermedad, o viceversa, y entonces ahí es donde pienso que es necesario que los dos trabajemos.

Relación

También otra cuestión es que uno nunca sabe si la relación no va a terminar algún día. Entonces ¿qué yo voy a hacer si es que eso pasa? ¿Cómo me voy a sostener económicamente?

Ahora tuvimos a nuestra hija hace 5 meses y hace un mes que empecé de vuelta a trabajar. Me armó el escándalo del año porque dice que la mamá debe quedarse en casa a cuidar a sus hijos, me dio a entender que soy irresponsable por irme a trabajar de vuelta.

Y la verdad no soy una mujer que se deja dominar en ese sentido. Y yo me enfrento a él, tengo luego un carácter medio fuerte.

Ahora ese es el gran problema, todos los días encuentra algo para molestarme, tira sus indirectas. Me pone trabas a mis proyectos. Yo quiero ir armando un negocio para poder trabajar acá en casa de tarde- noche en maquillaje y uñas que es lo que sé hacer, aparte de cumplir un horario administrativo.

Entonces, la idea es ir dejando poco a poco la oficina para tener mi propio negocio. No me apoya en nada, me hace problema porque quiero sacar préstamo y esas cuestiones. Me dice que los negocios son temas de varones.

Incluso me hace problema si voy a visitar a amigas, es como que me quiere estancar en todo, si es por él no voy a tener amigas tampoco.

No sé qué hacer. En este momento me estoy arrepintiendo mucho de haberme casado, pero él no era así de novios ¿Qué hago?

La respuesta:

Lamento mucho que estés pasando por esta situación tan difícil. Es comprensible que te sientas frustrada y atrapada en un conflicto de valores y expectativas, especialmente cuando se trata de un tema tan importante como tu independencia y tu papel como madre y profesional.Es fundamental que tengas una conversación abierta y honesta con tu marido. Tratá de expresar tus sentimientos y preocupaciones sin que se convierta en una discusión. Podés hablar sobre por qué valoras tu independencia y cómo eso también puede beneficiar a la familia en el futuro.Es importante que establezcas límites claros sobre lo que es aceptable en tu relación. Si él está tratando de controlar tus decisiones, esto puede afectar gravemente tu bienestar emocional y tu confianza. Hazle saber que necesitas su apoyo y que ambos deben encontrar un equilibrio.Considerá hablar con amigos, familiares o incluso un terapeuta. A veces, tener un espacio seguro para expresar lo que sentís puede ayudarte a ver las cosas desde otra perspectiva y a encontrar soluciones.Si tu sueño es tener tu propio negocio, comenzá a planificarlo. Investigá sobre cómo podrías hacerlo y qué pasos necesitarías seguir. Esto puede darte un sentido de propósito y dirección, además de ser un proyecto que te apasione.Pensá en lo que querés a largo plazo. ¿Es posible que tu marido cambie su forma de pensar? ¿Sos capaz de vivir con estas diferencias? Esto puede ser un momento para evaluar si la relación es saludable y si ambos están dispuestos a trabajar juntos para encontrar un camino que funcione para los dos.Rodeate de personas que te apoyen y que compartan tus valores e ideales. Esto puede ayudarte a sentirte menos sola en esta lucha y puede proporcionarte un espacio donde te sientas valorada y comprendida.Recordá que tu independencia y tus sueños son válidos. La relación debe ser un espacio donde ambos puedan crecer y apoyarse mutuamente. Si sentís que no hay posibilidad de cambio, puede ser importante considerar lo que eso significa para tu futuro y el de tu hija.

Psicólogo, sexólogo, especialista en parejas.