Hola diario Extra. Soy Fátima, tengo 30 años.
Me mudé a una nueva ciudad ya hace 2 años. Estoy en un pueblo muy lindo, en el interior del país. Me mudé porque me salió mi rubro de docente en una escuela de ese lugar.
Tengo una vecina que es muy cambiante, al principio me trataba superbién, pero luego empezó a ser medio bruja e inventaba cosas sobre mí a los demás vecinos.
Yo no entendía por qué. Mi casa está frente mismo a la suya y cuando ve que salgo afuera lo que ella hace es cerrar sus puertas y ventanas, supongo que para no verme.
Hace uno días nomás que yo me enteré que la señora anda diciendo que yo me meto con su marido, que le ando detrás, que por mi culpa es que ellos se pelean. Y me quedé fría cuando me contaron.
Yo no me fui a decirle nada porque no soy de ese tipo de gente, no me voy a rebajar ni nada.
Pero lo que esa señora no sabe es que realmente su marido le pone los cuernos, pero con una compañera mía, una docente, no soy yo, para nada luego, encima está viejo ya el tipo.
En fin, pasa que esa profe suele venir mucho a casa con otras profesoras, porque el colegio donde enseñamos está a una cuadra, entonces al salir a veces nos reunimos acá.
Y aparentemente el marido de mi vecina suele salir a mirar mucho, y la señora se habrá dado cuenta y demás.
Pero lo que a mí me indigna muchísimo es que a esta compañera sí mi vecina le re habla. No sé también si ella o qué le inventó alguna historia, pero se conocen de años y son como amigas.
Que me moleste a mí la señora con sus comentarios no me importa, sé que una mujer resentida puede actuar así o peor. Pero lo que sí me molesta es que la profe y el marido ajeno estén actuando de esta forma, viéndole la cara de estúpida a esa pobre señora. Encima me culpan a mí.
Ahora, mi tema es si contar la realidad o no.
Si cuento puedo armar un sarambí en la casa ajena y capaz ligo mi parte, pero si no cuento, van a seguirle viéndole la cara de estúpida. ¿Qué hago en este caso?
Buen día, Fátima. Siempre existe en cada vecindario ese tipo de vecinas metidas, mal pensadas o mal intencionadas, y no nos queda de otra que lidiar con ese tipo de gente. Pero no deberíamos dejar que nos afecten, ya que no podemos controlar lo que piensen o sienten. Ahora bien, con relación a la situación que se da entre tu compañera de trabajo y el marido de esta vecina, sí es propicio para tomar acción al respecto. Pero no precisamente hablando con esta vecina, sino al contrario hablalo con tu compañera, ya que su actuar está afectando gratuitamente tu imagen y si aquello trasciende puede incidir hasta en la cuestión laboral. Hablá bien con tu compañera, teniendo en cuenta que es amiga de la vecina, que se encargue de darle a entender que vos no tenés nada con su marido antes que vos tomes acción con la misma vecina y aquello se complique más para los amantes. Por otro lado, andá alejándote de a poco de esta compañera o tratá de compartir menos con ella, no es buena influencia.
