Soy Matías y mi novia se llama Patricia. Yo tengo 30 y ella 26. Mi relación con ella siempre fue buena, sí tenemos nuestros desencuentros, discusiones y cosas que de repente uno no acepta del otro, pero siempre fue todo muy llevadero.
Estamos juntos hace dos años, y en la intimidad siempre nos llevamos bien, pero una cosa que nunca aguanté de ella es que no quiere bañarse para tener sexo y verdaderamente todos tenemos ese haguino como se dice y no da gusto y no es cómodo estar íntimamente con nadie así.
Al menos yo no disfruto, y no puedo entender cómo ella siendo una señorita no le da importancia a ese tipo de cosas.
Yo por ejemplo, cuando le hago el amor me gusta mucho explorar todo su cuerpo, quiero que se sienta cómoda y que sienta luego placer, pero para eso tiene que estar limpia.
Hace un par de días tuvimos una discusión y me dijo que está harta de que yo le pida que se bañe antes de tener sexo y encima de todo se atrevió a decirme que en las otras relaciones que había tenido nunca le ponían peros para hacerle “de todo” si estaba “sucia”, asieté me dijo.
El primer punto es que demuestra que no quiere nomás ser limpia y lo otro es que le pillé su “mentirita” porque cuando empezamos ella me dijo que solamente tuvo un novio con quien tuvo relaciones y que el segundo fui yo.
Pero al decirme “en mis otras relaciones”, ya le pillé todito.
Cuando le reclamé luego que me mintió quiso arreglar, se mareó todo con lo que me iba a decir, pero luego tuvo que admitir que estuvo con otros. Me sentí jodido, un výro por creerle y tenerle fe.
Y eso se suma a lo otro que no quiere bañarse. Nos quedamos enojados, ella katu la que más está pichada conmigo he’i. Yo no sé qué hacer más en esta situación porque para mí es insostenible continuar así. No sé si darle un ultimátum ¿Será que una persona así puede cambiar? En serio para mí es muy importante la higiene, es de los principales requisitos para estar en pareja.
La respuesta: