26 abr. 2025

No los compres

@ruthbenitezdiaz @ruthbenitezdiaz

Marcelo llevó a los cuatro cachorritos blancos de la raza caniche de menos de dos meses de vida en una jaula y se ubicó frente al supermercado para exhibirlos y venderlos a 300.000 guaraníes cada uno. La mamá de los cachorros llevaba ya como cinco alumbramientos en toda su corta vida. Cada vez que comenzaba el celo, ya le traían a un perro de su misma raza para aparearlos y luego vender de nuevo los cachorritos.

La perrita, aunque nunca buscaba pareja, se convirtió en una máquina reproductora de crías para comercializar. Marcelo no encontró otra mejor manera de generar dinero que explotando a la caniche, en vez de trabajar. Su anterior perra murió luego de que le salieran varios tumores mamarios de tanto dar a luz.

La comercialización de animales es detestable desde todo punto de vista. Tener un perro de raza no te hace más “cool”. Al comprar uno estás fomentando la explotación y el abandono de los que no son de raza. Detrás del hermoso peludito que compraste en el shopping, hay una perra usada y abusada para producir y generar plata.

Ahora, en Paraguay se está instalando la moda de los pequeños cerdos de la raza “mini pig”. Son hermosos, pero se los vende como juguetes para que las personas puedan divertirse vistiéndoles o pintándoles las uñas. No compran por amor, sino porque les parecen lindos como cualquier cosa. Los compran porque les entretiene, como un juguete más.

Son seres vivos, no cosas como para ponerles precio y venderlos. Ningún animal merece ser tratado como mercancía, es como poner precio a los niños y venderlos. En nuestro país además es muy común la venta de animales exóticos, se los saca de su hábitat natural para hacer dinero gracias a las personas irresponsables que los compran.

Ya es hora de que la venta de animales de raza deje de ser un negocio y comience el rescate y adopción de los “sin casa”. La venta ambulatoria es ilegal, pero las famosas ferias que sí son legales hacen exactamente lo mismo. Comencemos a ver a los animales como son y rechacemos la comercialización. Rescatemos la vida.