Un torbellino llamó la atención de la población de Nueva Londres ayer. El inusual fenómeno duró 15 minutos y generó asombro y susto, pero su fuerza disminuyó pronto y, afortunadamente, no causó ningún daño.
Aproximadamente a las 14:30 del domingo, se escuchó un estruendo que alarmó a los vecinos de la compañía Hugua Pire, de Nueva Londres, Caaguazú. Aníbal Martínez se apresuró a sacar el teléfono y grabar el llamativo fenómeno.
Refieren que cada 3 ó 4 años suelen aparecer estos torbellinos en la zona. Uno similar se había formado también hace poco en la zona de Tembiaporá, sobre el lago Yguazú, y tampoco causó ningún daño, según informaron a Noticias Py.
Los torbellinos son parecidos a pequeños tornados, aunque su origen es distinto y su intensidad no suele ser peligrosa. Para que pueda formarse un torbellino el terreno debe ser completamente plano, el cielo totalmente despejado o apenas nublado y que la atmósfera esté relativamente fresca y sin viento.