Un parto normal, para Rocío (nombre ficticio) era la mejor opción para traer al mundo a su pequeñito. Pero la bendición de ser madre para toda mujer se convirtió en un verdadero infierno para su bebito.
En medio del alumbramiento, su retoñito al que alzó en sus brazos por primera vez en enero pasado, recibió de ella una terrible enfermedad: la sífilis.
Los médicos se percataron rápidamente y le exigieron que tanto ella como el padre se hagan análisis y ella sin demora se los realizó. No así el padre de la criatura, G. S., un mecánico del barrio Obrero, quien se negó rotundamente.
“Después de que nació el bebé estuvimos viviendo juntos dos meses. Él no quería hacerse los análisis y nos abandonó”, contó Rocío, asegurando que el hombre se borró totalmente sin siquiera responder por el peque.
Añadió que el niño está siguiendo un intenso tratamiento para evitar que le deje secuelas.
¿Otras infectadas?
La mujer dijo que teme que el hombre siga contagiando la enfermedad a otras mujeres, pues asegura que el mismo es bastante libertino en cuando a su vida sexual.
La víctima denunció al hombre en la Comisaría 4ª Metro para luego demandarlo, contó.
Desde EXTRA intentamos comunicarnos con el denunciado, pero el número del mismo estaba fuera de línea hasta el cierre de nuestra edición.
Otro caso horrendo
Hace dos años un abogado fue denunciado por transmitir VIH a varias mujeres a sabiendas de estar infectado. Las víctimas ascendieron a más de 10.