01 mar. 2025

Por años giró plata de España y su hermano le jodió en seco

Con el dinero se abrió un súper, pero nunca pusieron a su nombre. Doña demandó a su pariente y cuñada, el caso irá a juicio oral.

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El comercio que habría sido construido con las remesas de plata enviadas de España.

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“Trabajamos con mi señora por años en España, con el sueño de construir un supermercado en Paraguay, pero nuestro el error fue confiar en nuestros parientes, y ellos nos dejaron sin nada”, dijo a EXTRA, Pablo Acevedo Galeano.

El señor junto a Claudelina Prieto Osorio, viven Bilbao, y fueron supuestamente engañados por Silvio Prieto Osorio (hermano de Claudelina) y Celsa Insaurralde Centurión (cuñada de los denunciantes), vecinos del Km. 9 Lado Acaray, en Ciudad del Este.

Ellos demandaron a sus parientes por “apropiación”.

Además, el fiscal Carlos Antonio Almada, presentó imputación contra Silvio Prieto y Celsa Insaurralde y el 13 de febrero pasado, pidió el caso sea elevado a juicio oral. Tiene pruebas suficientes.

Don Pablo, contó que conoció a su señora Claudelina en España hace unos 15 años. Añadió que trabajaron duro durante años y así juntaron dinero para poder hacer realidad el sueño de ser pequeños empresarios en su valle, CDE.

Se pusieron de acuerdo con su esposa de enviarle plata a Silvio (su cuñado), para que compre el terreno y levante el súper.

Don Pablo, señaló que regresó al país con la esperanza de encontrar el buen uso que Silvio le había dado a los 275 millones de guaraníes, que le habían girado.

El señor encontró el supermercado listo y en funcionamiento, sin embargo, todo lo comprado estaba a nombre de su cuñado, nada a nombre de su señora.

Pablo decidió quedarse en el país y comenzar a ver las ganancias del súper, que tenía muy buena clientela.

El hombre aseguró que su cuñado solo le daba techo y comida. Jamás vio un guaraní. Ante esto le reclamó por qué no veía el fruto económico del local.

Entonces, su cuñado le dijo que el local no daba ganancias y que los terrenos los compró a cuotas. Pablo no tragó el cuento y le planteó a su cuñado que le devuelva el dinero que enviaron, vía escribanía y así no entrar en líos. Su cuñado se negó por lo que le demandó.

El entrevistado indicó que era muy injusto que sus parientes se hayan quedado con sus ahorros.