Cuatro perros grandes que deambulan por la calle aterrorizan a los vecinos de Barrio Obrero.
La mayoría de los que residen en la cuadra de 20 Proyectadas e Independencia Nacional fueron atacados por los perros de Freddy Tadeo López (48).
María Luisa Vera (56), quien es quinielera, fue atacada dos veces por los animales.
“Yo estoy traumada, perdí la paz. Tengo miedo de salir de mi casa, pero no me queda de otra porque tengo que vender mi quiniela”, manifestó.
El año pasado fue atacada en la vereda de su casa por una perra de raza boxer.
Hace unos días fue perseguida por los cuatro perros. “Yo corrí, tomé un palo para defenderme y me saltaron entre todos. Las heridas en mis piernas se complicaron porque soy diabética”, dijo.
El 22 de marzo pasado, María Luisa y cuatro vecinos: Rocío Martínez (26), Tanya Orrego (32) y Tatiana Martínez Isasi (20), denunciaron en la Comisaría 4ta al dueño de los animales.
El señor Luciano Martínez (59) también fue víctima de uno de los sabuesos y realizó su denuncia en la Fiscalía.
“Pasé por ahí y me saltaron de sorpresa los perros y me mordieron. El señor siempre les suelta. A veces les deja en la calle para que le atiendan su auto. Son raquíticos, pero bravos esos animales”, señaló a EXTRA.
Un día los vecinos fueron hasta la casa del señor López para pedirle que mantenga a sus animales dentro de su casa, pero fueron maltratados verbalmente.
Perros mordidos
Las mascotas de los vecinos también corren peligro.
La perrita de Rocío Martínez fue atacada por la jauría y de milagro se salvó de la muerte.
“Ya estamos cansados todos los vecinos. Buscamos soluciones en la comisaría, Defensa animal, Fiscalía, ya no sabemos a quién recurrir”, expresó.
Ahora mismo la principal preocupación de los pobladores es que durante todo el día hay muchos niños y adolescentes yendo y viniendo de sus instituciones educativas.
“Queremos que esto se solucione antes que pase una desgracia peor”, indican.
Según los denunciantes, el vecino cría animales en su casa. La perra de raza bóxer está constantemente embarazada. Todos están visiblemente desnutridos y probablemente no cuenten con las vacunas.