Dos paraguayos fueron noticia el fin de semana en Oviedo, España, por un episodio de violencia de género, en el que el supuesto agresor terminó accidentado.
El hombre con las iniciales C. A. G. G., de 37 años, habría llegado de una farra a primeras horas del sábado y empezó a golpear a una mujer, también paraguaya, que le suplicaba: “no me pegues, no me pegues”, frente al edificio donde vivían.
La chica, por suerte, logró zafarse y correr hacia un taxi, según testigos. Tras recibir el llamado, la Policía local llegó al condominio, donde vieron entrar al sujeto. Sin embargo, este se negó a abrir la puerta a los uniformados y subió las escaleras.
Otro compatriota, amigo del supuesto garrotero, quiso también impedir el paso de los agentes, pero al final contó en qué pieza lo iban a encontrar, en el cuarto piso.
Como detalle, ese socio fue a parar a la comisaría porque tenía una orden de detención, según informó el portal El Comercio, de Oviedo.
Una vez frente al 4° B del alquiler, los policías fueron recibidos por el compañero de cuarto del buscado, quien les dijo que el mismo entró muy nervioso a la pieza.
En ese ínterin, C. A. G. G. ya estaba colgándose de su ventana, como para pasar al 3° B, donde vivía su kape que quedó detenido.
Al parecer quiso hacer una huida de película, pero le salió el tiro por la culata y cayó al vacío.
El compatriota se dio contra el piso del patio y se rompió la pierna, además de sufrir un golpazo en la cabeza.
Fue trasladado hasta el Hospital Universitario Central de Asturias y, según medios locales, estaba bien. Con respecto a la mujer agredida, al parecer no era su novia y solo farrearon juntos.