“Los hijos nunca jamás deben ser rehenes de su padre o de su madre, sino hijos que hay que amar y proteger. Incluso en los regalos a los niños hay que tener cuidado, ya que pueden ser un verdadero chantaje para arrebatar a los hijos el cariño del marido o de la mujer”, fue lo que le respondió el Papa a un hombre que le compartió su historia de separación con su esposa.
Según contó el hombre, su exesposa inició una nueva relación con un hombre griego y quería ir a vivir al país de su nueva pareja junto con su hija de 5 años. Un juez impidió que la pequeña saliera del país, y posteriormente, el hombre fue encarcelado injustamente por supuestamente portar cocaína, aunque más tarde se comprobó su inocencia. Luego de eso, su exsuegra y dos de sus cómplices fueron condenados.
Pide mejores leyes
El Santo Padre recalcó que los hijos no deben estar en medio de los pleitos de parejas y que deberían existir leyes más adecuadas para que los hijos de padres separados puedan crecer en un entorno de amor y paz. “Son los niños los que nos piden que hagamos la paz y mantengamos la paz en nuestros corazones”, concluyó.