Los desgarradores mensajes que llegó a enviar Katia Brítez, víctima de feminicidio por parte de su exnovio, evidenciaban la espiral de violencia en la que vivía desde hace meses.
El 14 de febrero de este año, ella había denunciado que Osvaldo Zaracho (21) trató de matarle. “Te juro que me iba a morir y no quería morir así, dejé de luchar por momentos y ya no respiraba”, le escribió ella a su hermana.
Intentando sobrevivir, hizo un esfuerzo para abrazar a su agresor y calmarlo. “Le decía que todo estaba bien”, seguía contando.
En el mismo chat, revelado ayer por el canal SNT, mencionó los dichos del joven tras la brutal agresión: “Me dijo que no le gustaba que le rechace o le diga mal las cosas”.
Ella le pedía paz
También sacaron a luz los mensajes que Zaracho le mandó después de ese hecho.
“Esa persona no era yo, ni sé qué me pasó, ni qué pasó, pero sé que de alguna u otra forma voy a pagar”, le había expresado.
En otro mensaje decía: “Ya no voy a ningún lugar porque tengo miedo de ir preso, pero también es algo que tengo que hacer”.
La respuesta de la joven fue: “Dejame en paz”.
Por “su seguridad”
Osvaldo Zaracho fue llevado ayer a la Penitenciaría “Padre Juan Antonio de la Vega” de Emboscada.
Según datos del Ministerio de Justicia, el supuesto feminicida tenía que irse a Tacumbú, pero por su propia seguridad y debido a la situación de hacinamiento en dicha cárcel, lo trasladaron a Cordillera.
Por haber arrollado varias veces a Katia Brítez el domingo en el barrio San Isidro en Lambaré, él se expone a una condena de hasta 30 años de cárcel.