Ña María Margarita Gómez (42) estaba con su nieta de 10 meses en una hamaca en el patio de su casa del barrio San Antonio, de Capiatá.
Eran como las 8 de la mañana de ayer cuando en una de las piezas de su casa dormían sus hijos de 4, 5 y 6 años, todos ellos con discapacidad mental y física.
En otra pieza estaba su hijo mayor de 22 años.
La señora estaba en el patio con la bebé porque hacía mucho calor y no había luz.
De repente, la mujer vio que la pieza donde estaban los niños comenzó a quemarse rápidamente.
Ella en su desesperación no dudó en entrar a la casa con su nieta en brazos, pidiendo socorro a su hijo mayor, que estaba en la otra pieza.
Ya con la casa llena de humo y fuego, pudo llegar al dormitorio y sacar a los niños de 4 y 5 años, con ayuda de su hijo mayor.
En minutos la casa se convirtió en una bola de fuego y todo lo que la humilde familia tenía se había destruido, se quedaron sin nada.
Faltaba uno
María y su hijo mayor estaban más que desesperados porque no encontraban al niño de 6 años, con síndrome de Down.
Luego le vieron al costado de la casa, que ya estaba totalmente incendiada. Había sido el nene salió por una ventana al notar que la pieza se estaba quemando y así se salvó de morir quemado.
Gracias a la heroica reacción de la mamá, ella pudo salvar a sus hijos.
Se presume que el incendio se debió a un cortocircuito.
Sobrecarga
Rocío Gómez (20) es la hija de doña Margarita y dijo a EXTRA que desde la noche del lunes no hubo electricidad.
Ella calcula que a eso de las 8 de la mañana de ayer vino de nuevo la energía eléctrica y ocurrió el cortocircuito.
Rocío dijo que la familia se quedó sin nada, todo lo que tenían se quemó, lamentó.
“Los vecinos nos dieron algunas cosas, pero vamos a dormir sin techo”, comentó al tiempo de asegurar que sus vecinos llamaron a la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) y nadie atendió el teléfono y no recibieron asistencia.
Para cualquier ayuda a los niños y la bebé, se puede llamar al (0985) 281 459.