La Defensoría Pública del Estado de Paraná, en Cascavel, Brasil, consiguió reunir a una paraguaya y su pequeño hijo, quienes sufrían violencia familiar y fueron separados.
La historia de Patricia conmovió a muchas personas en Paraguay y también en el vecino país, donde figuras como Xuxa sumaron su voz al pedido de que devuelvan al pequeño junto a su mamá, en 2020.
En agosto de ese año, un fallo judicial le había concedido la custodia del niño al exmarido de la mujer, quien la había abandonado en el embarazo.
Él la denunció por supuesta falta de control prenatal y vacunación, y por no darle alimentos de origen animal.
El bebé fue afectado en su derecho a la lactancia. Luego de 50 días de no ver a su hijo, la madre consiguió que le concedan tres horas al día para darle la leche.
La organización Kuña Poty, de Alto Paraná, señaló que Patricia fue discriminada por ser mujer, migrante y vegana.
Buscó refugio
A finales de ese año, en plena pandemia y con todas las secuelas de haber sufrido violencia física y psicológica, la compatriota se armó de valor para huir a Paraguay con su retoño, en busca de refugio.
Acudió al Ministerio de la Niñez y Adolescencia, el Ministerio de la Mujer, y varias instituciones. El Juzgado de Niñez y Adolescencia de Luque les concedió una medida cautelar de protección.
En 2021, el Tribunal Superior de Justicia del Estado de Paraná (Brasil) dispuso que el niño conviva con ambos padres, residiendo con la mamá, y que el papá pague la prestación alimentaria. Cuando eso, el hombre reclamaba la restitución internacional.
Este año, la compatriota volvió a enfrentar el proceso judicial en Brasil. La Defensoría Pública de Paraná informó que el niño fue llevado a un hogar de abrigo en marzo, hasta que en abril, el Tribunal de Infancia y Juventud decidió que la familia vuelva a Paraguay.
Movida solidaria
El pasado 3 de mayo se hizo un festival en Areguá para ayudar a Patricia con todos los gastos judiciales. También llegaron a realizar sorteos por rifas.