La idea, que por cierto hizo crecer el negocio de Andrea Florentín (23), surgió en septiembre en un encuentro con amigos.
La joven tiene una heladería en Lambaré, y como hizo un curso de bartender, craneó recrear el típico chupachups, pero con deliciosos tragos; el chupachups de tragos o “Chupa Chupi”, por Chupis, el nombre de su negocio.
“Es toda una sensación”, según contó Andrea a EXTRA.
Los sabores son de Fantuvi (Fanta y vino), Caipiruva ( lleva limas, fresas, piña o mango, y se termina con azúcar y cachaça), Caipiriña (hecho con cachaza, azúcar y zumo de lima) y Blue Drink (tiene vodka, curaçao azul, limonada, jarabe de coco, entre otros).
“Se me ocurrió probar entre nosotros nomás, pero por suerte fue todo un éxito, a mis amigos les encantó y ahora mismo estoy comercializando y me va superbién”, indicó.
El producto cuesta G. 5.500 la unidad y a partir de 20 unidades, G. 4.500. Se vende a full, especialmente en las quintas, en las despedidas de fin de año, cumpleaños, despedidas de soltera (es infaltable), los viernes con amigos y en el tercer tiempo, los muchachos se quedan encantados.
Uno puede pasar a buscar de la fábrica y como no cuenta con delivery, Andrea se maneja con Moto Bolt.
“Es increíble cómo piden de todos lados, de Central y Sanber”.
Andrea también prepara tragos personalizados, depende del gusto de cada cliente.
Los frutos rojos son los preferidos de los clientes, también el chupachups de caña.