Feroz lío se armó ayer en redes sociales luego de que el jefe de una empresa de refrigeración haya contado en su cuenta de TikTok “El profe Aquino” que despidió a uno de sus empleados porque no iba “feliz” a trabajar.
“La actitud del empleado es la cara de la empresa”, alegó.
“A la persona que le estoy despidiendo es porque no le veo disfrutar de su trabajo, no le veo llegar a la oficina y decir ‘¡qué rico huele mi trabajo! Quiero vivir, dormir, morirme acá’ no le veo, así que es difícil”, se quejó.
El abogado laboralista José Estigarribia explicó que este tipo de despidos solo estaría permitido si el trabajo lo requiere. “No puedo decir que te despido porque estabas triste, a menos que te haya contratado para hacer reír a la gente en un evento, como una animadora”, argumentó.
Por su parte, Enrique López, ex director del Empleo en el Ministerio de Trabajo, dijo que despedir por ese tipo de motivo va en contra del artículo 91 del Código Laboral (despidos sin justificación).
Sanción
“Este señor cayó en un sincericidio. Si le despide injustificado pagando lo que indica la ley, no hay problema, pero desde el momento en que reconoce que le echó por no ser feliz, la empresa debe ser investigada por el Ministerio de Trabajo”, advirtió. Añadió que, dependiendo de la inspección, la empresa puede ser multada con hasta 40 jornales diarios, que serían unos G. 4.305.080.
Varios afectados
Agregó que son muchos los trabajadores que sufren de este tipo de situaciones, especialmente del área de atención al cliente, call centers o ventas, pero que al ser mayoritariamente informales se desaniman y prefieren no denunciar.
“Ahora el problema que tenemos es la ley de MIPYMES que van a poder echar sin preaviso ni indeminización. Si bien aún falta reglamentación, es un cháke para todos”, finalizó.
Patrones no deben desanimar
José Martínez, experto en Recursos Humanos para pequeñas empresas, dijo que hay trabajos que requieren una buena actitud, especialmente cuando se trata de atención al cliente. Por eso, las empresas buscan empleados que se ajusten a ese perfil.
Sin embargo, también destacó que las empresas deben tratar bien a sus trabajadores para no desanimarlos. “Tanto la empresa como el empleado deben hacer su parte. La empresa no puede pedirle al trabajador que esté sonriendo todo el tiempo, porque no son máquinas. Pero el empleado también debe hacer su parte para no arruinar el ambiente de trabajo”, explicó.