Laika, la perrita que falleció tras defender a su dueño de un ladrón, era muy querida por los vecinos de un barrio de Fernando de la Mora.
Juan Carlos Jara Cardozo (43), dueño de la mascota, señaló que fue rescatada de las calles cuando era una cachorra. Vivió siete años siendo cariñosa y muy guardiana.
Los vecinos expresaron al señor que estaban tristes por la partida de Laika.
“En casa no le faltaba nada, pero tenía sus proveedores en el barrio. De tarde iba a junto a una vecina que tiene un copetín y le daban las sobras de las comidas”, recordó Juan en contacto con Extra.
La perrita también hacía compañía a una vecina que tiene un negocio. “Frente a casa hay un comercio. Ahí hacía guardia y le daban purina”, señaló.
Juan Carlos, quien recién ayer fue dado de alta por una herida de puñal, también recibió la visita de una vecina que es vendedora ambulante.
“Vino a casa a decirme que Laika siempre le saludaba y que le acompañaba hasta la avenida”, manifestó.
Sin duda, además de valiente, la perrita tenía un gran corazón.
La familia tiene otras dos mascotas, un perro caniche y un gato, pero los chicos están muy dolidos por la muerte de Laika.
“Mi hijo, el más chico, es quién más le siente. Ella le acompañaba todos los días hasta la escuela, le dejaba y volvía. Cuando iba a jugar partido también le acompañaba”, apuntó Jara.
“Ella me salvó”
En la madrugada del jueves, cerca de las 4:00, Juan Carlos escuchó los ladridos de Laika, en el patio. “Yo pensé que era por algunos gatos en el techo. Después escuché ruidos en la cocina y al salir de la pieza un tipo extraño me atacó, entró a robar”, recordó el señor.
Forcejeó con el adicto, le pegó y quedó tendido en el piso. “El tipo ya estaba tirado, me di la vuelta para buscar algo con qué amarrarle y ahí vi que se levantó con algo en la mano. Levanté mi brazo y me clavó en la altura de la axila. En ese momento Laika le atacó”, dijo el señor.
El ladrón intentó huir, Laika lo mordió y el ladrón la apuñaló en el cuello y luego en el estómago. “Cuando me clavó ella actuó por eso digo que me salvó la vida”, expresó.
“Es un acto de humanidad”
Juan Carlos llamó al 911 y llegaron dos patrulleras. Una le llevó al hospital de Fernando de la Mora y luego fue trasladado al Hospital del trauma. Su herida de 4 centímetros de profundidad tuvo 18 puntos de sutura.
“Supe que la policía de la Comisaría 2° también auxilió a Laika y quedé sorprendido, es un acto de filantropía, de amor al prójimo”, indicó. También expresó su agradecimiento a Diana Camarasa, quien se hizo cargo de la veterinaria.