En la tarde de ayer, luego de un laburo de meses, finalmente se pudo colocar la monumental Virgen de Caacupé, obra del reconocido artista plástico Ricardo Núñez, en el Tupãsy Ykua.
La escultura quedó lindísima, igualita a la imagen original de la Virgen, tanto que hasta el propio monseñor se “asustó” por tanta belleza, según el artista.
“El rostro quedó impecable, impacta mucho, y es idéntica a la original”, dijo a EXTRA el artista.
La imagen mide unos 9 metros y medio y más de 2 mil kilos.
Tuvo un costo inicial de 165 millones, pero se amplió a 190 millones de guaraníes, con los trabajos que a partir de su colocación realizarán en el lugar.
“Le vamos a hacer un ykua aparte ahora tras su instalación. Será de verdad, con piedras de Amambay. Tendrá una fuente única”, contó.
La estructura es de hierro reforzado, cemento y resina.
La obra se terminó un poco más de tres meses, pero a la par estaban haciendo otras dos imágenes de la virgen para la rotonda y otro para Tobatí. “El rostro es la parte más trabajosa, justamente porque tiene que quedar perfecto. Puede llevar días de trabajo, como horas, depende de cómo uno esté inspirado”, apuntó.
El traslado se realizó desde el barrio Caacupemí de la ciudad que queda re cerquita del Tupãsy Ykua, pero todo ese proceso de mover la estructura en grúa duró como cinco horas, según el artista. “Tuvimos varios obstáculos, la imagen sobrepasaba algunos tendidos eléctricos y fue toda una odisea lograr pasar”, dijo. Esta primera obra que se está entregando es costeada por la Gobernación de Cordillera.