Una joven de 21 años, estudiante de bioquímica, falleció en extrañas circunstancias en un motel de Capiatá, donde mantuvo un encuentro con un policía de 22 años.
Ayer se realizó la autopsia de la víctima. Descartaron que la muerte haya sido violenta, dado que la joven no presenta ninguna herida de arma de fuego o arma blanca. Tampoco tiene signos de asfixia o golpes en el cuerpo.
Un informe preliminar de la Morgue Judicial indica que la causa de muerte es un infarto. El doctor Pablo Lemir, médico forense, manifestó que la víctima presentaba niveles elevados de enzimas cardíacas, lo que sugiere un problema cardiaco.
El forense manifestó que la joven presentó “una pequeña laceración (desgarro) vaginal”, lo que sería la causa del sangrado al momento que ingresó al hospital; sin embargo, la hemorragia no fue la causa de muerte.
El tío y padrino de la joven habló con los medios sobre lo sucedido. “No creo en un infarto porque ella nunca se enfermó. La conozco desde que nació y siempre fue muy sana”, manifestó.
El familiar expresó que la víctima era una persona muy dedicada a sus estudios. “Era una flamante joven que estaba luchando, estudiando para salir adelante. Tercer año de Bioquímica, ya estaba haciendo su pasantía”, dijo en contacto con SNT.
El cuerpo de la joven sería entregado hoy a los familiares. Aún se esperan los resultados de los exámenes toxicológicos para determinar si hubo consumo de drogas.
La fiscala Carolina Martínez indicó que según las investigaciones la pareja estuvo en el motel 20 minutos, luego el policía solicitó un auto por plataforma digital y trasladó a la chica al Hospital Distrital de Capiatá. El uniformado se encuentra detenido.