“Te confieso que estoy libre ahora, pero tengo miedo”, empezó Max Pitangui. Señalado como bolsonarista y miembro del grupo que invadió el Congreso Nacional de Brasilia en enero pasado, en protestas contra el Gobierno de Lula, habló con EXTRA sobre su asilo en nuestro país.
“Las acusaciones sobre mí no son ciertas, me acusan de crímenes de opinión”, aseguró el extranjero, agregando que le recomendaron quedarse a vivir en Asunción.
Max dijo que él ni ahí estuvo en el movimiento contra el presi rapái, sino que más bien le persiguen por denunciar hechos de corrupción.
“Soy una persona que solo votó, no soy un radical”, apuntó asegurando que ni siquiera es bolsonarista. Según su perfil de Instagram, el brasileño se dedica a la publicidad, es influencer.
“Me gusta mucho el tereré y el asado paraguayo, es diferente, pero muy rico. La gente es diferente, te trata con mucho cariño. Son como hermanos”
Eligió una potencia
El radialista influencer manifestó que durante años investigó sobre Paraguay y cómo nuestro país creció a diferencia de sus vecinos.
“El crecimiento es constante y tienen un clima similar. La economía es mucho mejor que en Argentina y otros países de la región”, indicó.
“La visión que tengo de Paraguay es que es una potencia que está creciendo en América Latina”, continuó.
Se queda acá
Pitangui refirió que su familia está muy preocupada por él, su esposa y sus hijos, pero que tuvo que venir porque temía por su propia vida.
“Tenía miedo de muerte estando allá, estaba muy difícil ahí. No podía hacer nada, no podía salir a ningún lado, porque tenía miedo de terminar muerto”, manifestó.
Dijo que no tiene interés de volver a su país aunque la cosa se solucione después. “Es triste. Allá se está investigando, pero yo quiero recomenzar mi vida. Cuidar de mi familia y vivir en paz”, expresó.
“Estoy traumado, vivo con miedo. Apenas voy al mercado”, finalizó el brasileño.
Otro estaría acá y con alerta roja
Osvaldo Eustáquio sería otro supuesto soldado del movimiento de Bolsonaro que pidió asilo político a nuestro país y ya estaría acá, según los medios del vecino país.
De acuerdo con las informaciones publicadas en los portales rapái, Eustáquio tiene alerta roja en Interpol. Sin embargo, el comisario Carlos Duré, jefe del organismo policial internacional, dijo que no podrá ser extraditado pese a la alerta si es que tiene la protección política.