Ver colgada y sin vida a su querida perrita parecía una pesadilla. El lunes, Liz Franco Sanabria llegó su casa, en el barrio Maristas del Coronel Oviedo (Caaguazú) y solo le recibió su perro Negro.
Pero Sacha no venía para saludarla y moverle la cola, como siempre. Comenzó a buscar a su cachorra de 7 meses, una mestiza de pastor alemán y huscky, pero no la encontraba por ninguna parte, por lo que salió a buscarla por el barrio.
No la encontrada por ningún lado. Hasta que llegó a la casa de un vecino de nombre Miguel Galeano. Él le comentó que por la mañana se escapó y la llevó de nuevo a la casa.
Le confesó
Otro vecino le atajó y le dijo que “ya no aguantaba más ocultarle la información”.
“Me dijo que vio al señor Vicente, junto a su pareja que le llevaron a Sacha hacia un baldío ajeno donde le colgaron y le dejaron ahí hasta que murió, todo porque supuestamente mató a su gallina”, expresó la dueña en una declaración testifical ante el Ministerio Público.
En un principio ella no creyó que fuera posible que el señor haya cometido el crimen, hasta que se topó con la macabra escena: su hermosa peludita estaba colgada de una piola en un yuyal.
El principal sospechoso es Vicente García Cañete, vecino del lugar, quien ya se encuentra imputado por maltrato animal.
La fiscal del caso Gloria Rojas indicó que el agresor se encuentra prófugo y con orden de prisión preventiva.
“Él alega que el perro se había ido a molestar a las gallinas que tenía, entonces le ahorcó y le colgó de una soga. Él le habría confesado esto a la dueña del perro”, indicó.
Agregó que “tiene una expectativa de pena de 6 años de prisión”, expresó. Una vez que se lo encuentre, será puesto a disposición de la Comisaría 31 y del Juzgado Penal correspondiente.
Dejó sin una patita a caniche
Vilma Ramírez Villamayo (37) recibió una llamada de urgencia. Le avisaron que a su perrito Chocho le balearon. El hecho ocurrió el martes, en el barrio San Miguel, km 12 Ciudad del Este.
Según contó a EXTRA, su vecino Antonio Ramírez le disparó con una escopeta porque correteó a sus gallinas.
“Mi hija de 7 años salió con su amiguita a buscar a Chocho. Y él pensaba que estaban jugando, como no sale mucho a la calle corrió. Ahí fue que disparó el señor. Mi hija vio todo, quedó muy mal ella”, indicó.
Chocho tuvo que ser amputado de una de sus piernitas porque la escopeta la destrozó.
“‘Demasiado escándalo hacen por un perro’, me dijo la hija del señor que ya es adulto mayor, pero es parte de mi familia. La gente no dimensiona que no puede lastimar así nomás a un animal”, lamentó.
Vilma indicó que realizó la denuncia en la Comisaría 12ª local y ayer fue a declarar. Espera que su caso no quede impune. “Ya lloré muchísimo de la impotencia”, expresó.