17 sept. 2024

Estafó a un señor que tiene a su hija internada y le robó todo

Delincuente hace de las suyas en Hospital de Trauma de Asunción. Le prometió medicamentos gratis o más baratos, pero le estafó.

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Don Waldo Acosta (65) quedó muy afectado. Pide que por lo menos le devuelvan el celular.

Gentileza

“Eh, ¿Ne’ira pesé (todavía no salieron) de alta?”, fue la pregunta que llamó la atención de Waldo Acosta, de 65 años.

Como hace 15 días prácticamente vive en los pasillos del Hospital de Trauma de Asunción, dio por sentado que aquel hombre que le hablaba con demasiada confianza lo conocía.

Su hija de 21 años, sufrió un accidente de moto en Liberación (San Pedro), y pensó que el señor también estaba allí acompañando a su familiar, al menos eso le dijo.

En menos de media hora se ganó su confianza, porque además de hablarle en guaraní al igual que él, prometió conseguir algunos medicamentos gratis y otros más baratos, incluso le dijo que le iba a prestar dinero.

Sin embargo, ese mismo día, el lunes último, terminó estafando a Waldo, a quien le robó dinero en efectivo y su celular.

La denuncia fue realizada en la comisaría 3ª Metropolitana de Asunción.

Su nuera, Ramona Martínez, contó a EXTRA que el hombre lo convenció y lo llevó hasta el Mercado 4, donde supuestamente conseguiría los remedios a mitad de precio.

Pilló, pero tarde

“Como tenía poca plata, confió y se fue con él, porque le dijo que él conseguía los medicamentos de IPS y que hasta ahora no gastó nada por su paciente. Le supo entrar de ese lado”, explicó.

Estando sobre las calles 9 de Marzo c/ Mayor Fleitas, detrás de la Galería San Miguel, el hombre sacó un teléfono viejo y simuló hablar con una persona.

“Después de eso cortó y le preguntó a mi suegro si tenía G. 120.000 para prestarle, que el domingo hizo una actividad y juntó G. 1.500.000, y que al retirar eso le iba a reponer, pero el doble”.

Sin dudar, Waldo le entregó el dinero, pero antes de retirarse, el señor le pidió a Waldo la foto de la receta de su hija que tenía en su celular.

“Él le pasó confianzudamente el celular y el señor le dijo que se siente y que le espere, porque él se encargaría de todas las gestiones”, refirió.

Waldo esperó por varios minutos, pero pilló que fue engañado cuando vio que el señor regresó, lo miró a escondidas desde una esquina y prácticamente se fue corriendo. Waldo lo siguió, pero sin éxito alguno.

Ay u d a

Waldo apela a la solidaridad de la gente para comprar los medicamentos que su hija necesita. Comunicate al (0986) 895 609.