31 ene. 2025

Despensera escrachó a morosa: “debe muchísimo por caña”, dijo

La clienta dijo que la doña le pidió G. 3 millones a cambio de borrar la publicación. “Todo empezó porque ella dijo que yo me metí con su marido”, señaló la chica.

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El monto total de la deuda de Analía alcanza G. 1. 522.500, monto que la despensera tiene anotado en su libreta. Pero la chica alega que es mentira.

“Te voy a pagar cuando pueda”, “Cuando venda mi casa voy a cancelar la deuda”, fueron las excusas que Analía G. (30) supuestamente le dio a Vildalia A. (50), una despensera de Capiibary (San Pedro).

La mujer esperó por más de un mes para recuperar su platita, pero como no lo consiguió, escrachó a Analía a través de un portal digital.

“Cómo piko no va a deber si ika’u del Paraguay, debe muchísimo por caña (...) es mentirosa, me llama y me miente”, mencionó Vidalia, a través de un audio de WhatsApp publicado en una radio local.

La clienta también hizo su descargo y, a través de unos mensajes de voz, contó su verdad. Vidalia señaló a EXTRA que la deuda es de G. 1. 522.500, monto que tiene anotado en una libreta.

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El monto total de la deuda de Analía alcanza G. 1. 522.500, monto que la despensera tiene anotado en su libreta. Pero la chica alega que es mentira.

“Su marido le solía enviar plata y ella me habló y me preguntó si podía deber, y como a su amiga le hacía deber, entonces le dije que sí”, señaló.

Analía supuestamente le dijo que viajaría a España, y por esa razón puso en venta su casa, dinero con el cual pagaría a Vidalia, siempre según la versión de la mujer.

La doña se enteró de que la venta se concretó y por esa razón la llamó por teléfono.

“Después de eso me envió un mensaje y me dijo que usó con otro lo que sería para mí. Me callé y luego le volví a mensajear y jamás me respondió y así me tuvo por un mes y pico”.

La chica supuestamente se hacía la desentendida, hasta que hace poco le llamó y le dijo que esta vez sí le iba a pagar, pero nuevamente, Vidalia se quedó esperando.

“Había sido ella; se fue con un hombre ajeno y él le comió toda su plata”, refirió Vidalia.

Tras la viralización del escrache, la clienta supuestamente le dijo a la despensera que nunca le va a pagar.

En contacto con EXTRA, Analía manifestó que va a denunciar a Vidalia porque solo le debe G. 320.000 y no el monto que la doña alega.

“Yo solamente le debí una semana, compré de ella una carne de G. 100.000 y otras cosas de chuchería’i. Además, dijo que estoy debiendo por caña y es mentira”.

Analía contó que se encuentra fuera del país y se enteró del caso a través de una amiga, quien le llamó y le pidió que revise las redes sociales.

Ména ajeno

“Todo empezó porque ella dijo que yo me metí con su marido y ahí ya le dije luego que presente las pruebas, de eso ya pasaron cuatro meses, ese es el problema”, indicó.

Lo más grave de todo, según Analía, es que Vidalia supuestamente le viene extorsionando desde el miércoles último.

“Ella me llamó, pero no tenía cómo grabarle, pero ella me dijo: ‘Vos me tenés que pagar G. 3.000.000 para quitar la publicación que yo hice’, pero cuando eso, yo todavía no sabía nada”, dijo Analía. “Si tiene suerte le voy a pagar”, dijo.

Ya hablaron, pero...

Analía estaba segurísima de que ya había llegado a un acuerdo con Vidalia, pero como la expuso públicamente, dijo: “Si tiene suerte, le voy a pagar”.

En cuanto a la casa que supuestamente iba a vender, Analía manifestó que su intención nunca fue esa, porque se trata de una propiedad del gobierno y tampoco le dio falsas esperanzas a Vidalia.

Analía solo espera regresar a Paraguay para levantar una denuncia en la comisaría contra la despensera, porque además de ridiculizarla, también manchó su buen nombre y reputación, según dijo.

“De una señora también compró gallinas; dijo que le iba a pagar, pero no lo hizo. En todas partes debe; ella es de otro barrio, pero vino acá a deber, donde vive su familia. Una señora me contó que también le debe por cerveza y tampoco le quiso pagar”, Vidalia A, despensera.

¿Y la firma?

“Yo no le estoy robando, tampoco le dije qué día le voy a pagar, solamente le dije que iba a viajar y que no le iba a poder pagar. Aparte de eso, ella tiene que tener la firma (en la libreta), porque las cosas no se hacen sin que tengan consecuencias”, Analía G, clienta.