Al grito de “Queremos nuestra plata”, un grupo de padres y alumnos del Colegio Nacional Naciones Unidas de Asunción se manifestó el viernes por la noche frente a la casa de la familia Garay, para exigir la devolución completa de unos G. 14 millones que habían recaudado para su fiesta de graduación, de los cuales se habrían apropiado indebidamente, según denunciaron.
Tras quedarse sin colación, los alumnos decidieron festejar por lo menos su último día de clases, y aprovechando la ocasión, de camino decidieron hacer una parada en la vivienda de Diego Garay y Josefina Garcete, padres de su delegada de curso, quienes eran los encargados de guardar el fondo escolar, por el que tanto habían trabajado durante todo el año.
Rajaron
“Uno de los guardias nos contó que hace unos días se subieron a un Bolt y se mandaron mudar, pero cuando llegamos, vimos que su familia estaba sentada en la vereda, y cuando nos vieron, en seguida se escondieron”, comentó una de las madres.
Los padres descubrieron el faltante de dinero en la quincena de noviembre, y tras encararlos, la señora Josefina Garcete confesó que su marido lo usó para invertir en un negocio que aparentemente le salió mal, y aún no tenían el monto completo para reponerlo, por lo que solo pudieron devolver G. 6 millones. Sin embargo, con la firma de unos pagarés, se comprometieron a devolver lo restante en los primeros días de diciembre.
Los denunciantes señalaron que desde hace cuatro días no saben nada de ellos y que, en caso de no recibir retorno, se seguirán manifestando “para hacerles pasar vergüenza”.
“Yo ya tenía todo el zapato y el vestido de mi hija, y ahora, ¿cómo le explico que ya no hay plata para su colación?”, finalizó la mamá.