La clínica Medi Gin (Medicina Integral Ginecológica), que operaba sin autorización en Presidente Franco, Alto Paraná, fue allanada en la tarde-noche del viernes y luego en la madrugada de ayer, por la Fiscalía y la Policía.
El procedimiento fue en base a una denuncia recibida sobre supuestos abortos que se practicaban en el lugar.
Además, los investigadores abren la posibilidad de un ñembo negocio de tráfico de órganos o extracción ilícita de tejidos humanos.
El comisario Richard Vera, jefe de la División de Inteligencia de la Policía Nacional, dio detalles escalofriantes sobre las investigaciones realizadas en el establecimiento irregular.
El agente indicó que la dueña, Nilda Cáceres (65), fue detenida y quedó a disposición del Ministerio Público.
Señaló que en el lugar se encontraron varias evidencias, entre ellas tres frascos de tejido humanos, jeringas usadas, documentos, tres cuadros de explicación médica de perforación uterina. Todos los elementos van a ser cotejados e investigados.
Buscaron en ductos
Vera he’i que junto con policías y miembros de la Fiscalía volvieron ayer de madrugada a la clínica. Entre todos comenzaron a buscar más evidencias con respecto a las investigaciones. Luego decidieron destapar los registros desague de la propiedad.
“Lograron sacar de los desagües lo que presumimos serían tejidos humanos e incluso ojitos y restos de lo que serían tripas. No sabemos si otros elementos ya fueron arrastrados hacia las alcantarillas de afuera”, sostuvo el agente.